Los mitos alimentarios, al igual que
otros mitos, son verdades para los que creen en ellos pero en realidad carecen
de fundamento. Estos mitos llegan a nosotros a través de nuestro entorno
(familia, amigos, compañeros) e incluso a través de los medios de comunicación.
Para evitar que estas falsas creencias nos influyan negativamente en nuestros
hábitos alimenticios es necesario informarse de forma adecuada.
Existen
muchos y diversos mitos sobre alimentación, entre estos podemos mencionar
algunos como los que muestro a continuación:
- Las
frutas ácidas adelgazan.
Ningún alimento tiene la función de adelgazar. Para quemar la grasa hay que
ingerir menos calorías de las que el cuerpo necesita y practicar ejercicio
físico. No obstante si es recomendable comer tres piezas de fruta al día, entre
las que se encuentre un cítrico.
- Los
productos integrales adelgazan. Los productos integrales tienen
práctica-mente las mismas calorías que los productos refinados. La diferencia
radica en que los productos integrales tienen mayor contenido de fibra y
minerales y por tanto poseen un poder saciante y mayor volumen, lo que evita
comer más cantidad de otros alimentos.
- Mezclar
hidratos de carbono y proteínas engorda. Son la base de las llamadas dietas disociadas. Estas
dietas no tienen ningún fundamento científico, ya que todos los alimentos son
una mezcla de nutrientes y no pueden separarse las proteínas y los hidratos de
carbono de cada alimento.
- Beber
agua durante las comidas engorda.
El agua no posee calorías y por tanto no proporciona energía. Beber agua antes
de las comidas puede producir sensación de saciedad, por lo que se recomienda
en dietas de adelgazamiento. El agua tampoco tiene el poder de quemar calorías,
por tanto, no por beber más cantidad de agua se adelgaza.
- El
pan engorda. El pan
es rico en hidratos de carbono, el nutriente que necesitamos en mayor
proporción en nuestra dieta. Su composición es la misma por dentro y por fuera,
por lo que si se quiere ingerir menos calorías se debe comer menos cantidad, y
no quitar la miga. De hecho, la miga de pan contiene más agua que la corteza y
por tanto tiene menos calorías en proporción.
- Saltarse
una comida adelgaza.
Saltarse una comida es un mal hábito y los especialistas recomiendan realizar 5
tomas diarias, para no llegar con excesiva hambre y ansiedad a la siguiente
comida.
Estos,
entre otros muchos, son mitos que nos rodean cada día y de los que tenemos que
deshacernos pues resultan perjudiciales para nuestra salud y bienestar.
